El Defensor Sporting uruguayo se valió de la amplia ventaja que le proporcionó la victoria en la ida por 9-0 sobre el Sport Huancayo peruano y se clasificó a los octavos de final de la Copa Sudamericana, pese a caer por 0-2 el miércoles ante sus rivales de la serie.
Con la consigna de evitar el descuento en la cifra de escándalo de la semana pasada, los uruguayos dedicaron todos sus esfuerzos a defenderse y dosificar al máximo el impacto de los 3.200 metros de altura de la ciudad peruana de Huancayo.
En el estadio de esa ciudad, se pudo ver a un Defensor haciéndole honor a su nombre, frente a un Huancayo que cambió casi a toda su plantilla, incluido al entrenador, para afrontar este partido con entusiasmo, pero también con poco peso en sus líneas.
Tras más de 20 minutos de imprecisión en ofensiva, el portero uruguayo Silva logró impedir la caída de su portería a los 24 y 25, luego de unas buenas combinaciones entre Sotil, Ávila y Mosto, los jugadores que llevaron la iniciativa local.
A pesar de las arremetidas por la derecha de Miguel Huertas, el defensa más dinámico de los peruanos, y el buen juego de Sotil, fue Ávila el que falló en dos ocasiones y luego Mosto, a los 41, al enviar desviado un remate de cabeza.
Sin embargo, cuando la primera mitad terminaba, Ávila lanzó un remate potente que dio en un palo y terminó venciendo la portería uruguaya tras estrellarse en el cuerpo del defensa Damián Suárez.
En el reinicio, los jugadores peruanos intentaron mantener el nivel ofensivo y la dinámica en su juego, al punto de que el portero Silva salvó con mucho esfuerzo otro remate de Ávila.
Pero sólo a los 65 el recién ingresado Ramírez conquistó el segundo para el Huancayo con un potente remate que elevó el entusiasmo de sus aficionados.
Con las ganas evidentes de demostrar que la diferencia no era la abismal del primer partido, los peruanos siguieron atacando sin éxito y se resignaron a cerrar una victoria pírrica que, sin embargo, les permitió salvar el honor.
